Cataluña, País de Trufa – Vic, Capital Gastronómica de la Trufa Negra

Cataluña cuenta con una gran tradición y cultura en la recolección de trufa silvestre, siendo pionera en su aprovechamiento dentro del territorio español. Esta vocación temprana también se extiende al cultivo de la trufa negra, como lo demuestra un artículo publicado en el periódico La Vanguardia el 6 de diciembre de 1911. En él se menciona una conferencia celebrada en el Instituto Agrícola Catalán de San Isidro, bajo el título «Industrias rurales y cultivo de la trufa», impartida por don José María Pujador y Ventós.
En la comarca de Osona, cuya capital es Vic, es dónde se inicia la tradición y la cultura de la trufa negra en España. En Vic, encontramos la primera Lonja de trufa negra del Estado, y en su Plaza Mayor es posible adquirir trufa negra fresca todos los días de mercado semanal durante la temporada de recolección. Además, la zona acoge diversos eventos dedicados a este preciado hongo, como la Feria de la Trufa de Centelles o el Trufforum Vic, que celebran y promueven su valor gastronómico y cultural.
Según el gastrónomo y sommelier, Ramon Roset, en referencia a Trufforum Vic destaca que, “La ciudad de Vic ha sabido aprovechar la oportunidad que se le presentaba para convertirse en una de las capitales de la trufa negra a nivel europeo, acogiendo este certamen que es toda una demostración de cómo difundir y promocionar un producto, en este caso la trufa negra. El Trufforum es un evento de aquellos que los anglosajones llaman “all in one”: si quieres saber cualquier cosa de la trufa negra a cualquier nivel, en el Trufforum lo encontrarás. Son unas jornadas gastronómicas, una feria, un congreso y un espacio formativo y demostrativo. En mi opinión, el Trufforum marca un posible camino a seguir -y no digo que no haya otros- para difundir y promocionar un producto. Y también marca una ambición: la de promocionar sin complejos, y globalmente, la trufa negra como un producto de calidad”.
Vic y la comarca de Osona ocupan una posición central en la cultura culinaria de Cataluña, combinando una rica tradición gastronómica con propuestas innovadoras que han dado lugar a una oferta diversa y de calidad. Productos emblemáticos como la longaniza de Vic destacan junto a una cocina creativa que llena la comarca de excelentes restaurantes. En este contexto, la trufa negra se ha integrado plenamente en la identidad gastronómica local, presente tanto en los menús de los restaurantes como en los productos gourmet. Muchos de estos espacios se han convertido, por sí solos, en auténticas experiencias turísticas (Fuente: National Geographic Viajes).